La Asociación Alemana de Fútbol ha penalizado duramente a Paolo Guerrero, jugador peruano del Hamburgo, por una de las entradas más lamentables que se recuerden en los últimos años en la Bundesliga. El jugador corrió más de 30 metros para golpear desde atrás al meta del Stuttgart, Sven Ulreich.
Guerrero fue expulsado con roja directa por esa bestial entrada, al cazar al portero Ulreich en una jugada que no venía al caso, con el balón cerca del banderín del córner.
Tras analizar en vídeo la acción, se ha decidido poner un castigo ejemplar a Guerrero, que no podrá jugar por los próximos ocho encuentros, aunque el Hamburgo pretende apelar para tratar de que se reduzca la sanción.
En cualquier caso, la acción de Guerrero, incomprensible desde todo punto de vista, podría costarle además al internacional peruano una multa por parte de su club.